miércoles, 31 de agosto de 2011

Oda a Don Clodoveo. ¡Que mareo!

Hola Hidalgos y altas damas
que ayer vine a esta rivera
trayéndome un chascarillo
para las nobles ripieras
Veréis, Torcuato y amigas
Sisebuta....
Segismunda...
Recordáis al Caballero
rechoncho, de muy mal trato,
no estoy hablando de Torcuato,
que se llama Clodoveo,
es director de un Museo
de cosas viejas, del Prado?
algo así, el muy taimado
lleva sombrero de copa,
lazo de seda y estopa
Y su señora, condesa es,
de alta alcurnia
Pues bien, me ha dicho Palmira
que dijo su prima Elvira,
hermana de Panticosa,
aquel que fabrica sillas
que lo han visto por Sevilla
en los toros, con mantilla,
con peinetas y clavel,
¡Será bravo el churumbel?
y la esposa en Alicante
comiendo buena morcilla
de la brava, la picante...
Así que queda ya el dicho
Don Clodoveo, que es muy feo,
siga tocando mantillas
carmín, zapatos de aguja
y su esposa que no es bruja
va y se hincha de morcilla
Don Clodoveo, mira. mira,
¿Te llamamos Casimira?

Bueno que ya me voy yo
y me oculto con recato
Volveré dentro de un rato...
Febrero el 2006 en el andurrial el ripio, resucitando a Cunegunda de la Alzada, de todos la más callada.

1 comentario:

María Teresa Cobos Urbano dijo...

Esto estaba en el baul de los recuerdos el andurrial el ripio,no me resistí a traerlo aquí,je,je ripiar es sanísimo solo que es dificil parar cuando se le coge vicio