Tu madre debía de haber ido a comprar el pan, como empezaba Umbral sus artículos, porque hablé con ella por la noche y estaba tranquila, por la mañana apenas abrí la oficina de Viajes Málaga, cuando sonó el teléfono y me anunció su feliz alumbramiento y dispuesta ya a marcharse a tu casa.
No diste ningún problema al nacer.
En cuanto pude me escapé a abrazarte, pues ya te conocía por las fotos y por las descripciones de tus padres, que eran:" Niño precioso y muy tranquilo". Te recuerdo en un sofá verde y blanco de flores, con la sonrisa dibujada siempre, aún cuando tu prima Elvira, un mes mayor, te robaba el chupete, o cuando tu primo Quique, un mes menor, queria jugar a las patadas.No recuerdo verte llorar, y al ser el primero de tu casa, fuiste también el más fotografiado, jugábamos las tias a disfrazarte, a meterte en una canastita, a bañarte, eras mi muñeco favorito.
Trajiste mucha alegría a esta familia, tu abuelo organizó el Bautizo a espaldas de tus padres, y se reía con Don Antonio, el cura de cabecera, tu tio Alfonso y conmigo, tramando la forma de hacer venir a tu familia de Madrid para la Ceremonia.
Y ahora, en el día de tu boda, en esta fotografía, he vuelto a ver aquella sonrisa bondadosa y pícara, también la he visto en la Bella Ana, y sé que te va a ir bien en tierras Incas, porque siempre tendréis amigos que os arroparán. Te quiero Chechu y me siento muy orgullosa de haberte amadrinado.
El día que tu naciste fue un día extraordinario, en el cielo se alinearon dos planetas y brillaba la media luna creciente...
No diste ningún problema al nacer.
En cuanto pude me escapé a abrazarte, pues ya te conocía por las fotos y por las descripciones de tus padres, que eran:" Niño precioso y muy tranquilo". Te recuerdo en un sofá verde y blanco de flores, con la sonrisa dibujada siempre, aún cuando tu prima Elvira, un mes mayor, te robaba el chupete, o cuando tu primo Quique, un mes menor, queria jugar a las patadas.No recuerdo verte llorar, y al ser el primero de tu casa, fuiste también el más fotografiado, jugábamos las tias a disfrazarte, a meterte en una canastita, a bañarte, eras mi muñeco favorito.
Trajiste mucha alegría a esta familia, tu abuelo organizó el Bautizo a espaldas de tus padres, y se reía con Don Antonio, el cura de cabecera, tu tio Alfonso y conmigo, tramando la forma de hacer venir a tu familia de Madrid para la Ceremonia.
Y ahora, en el día de tu boda, en esta fotografía, he vuelto a ver aquella sonrisa bondadosa y pícara, también la he visto en la Bella Ana, y sé que te va a ir bien en tierras Incas, porque siempre tendréis amigos que os arroparán. Te quiero Chechu y me siento muy orgullosa de haberte amadrinado.
El día que tu naciste fue un día extraordinario, en el cielo se alinearon dos planetas y brillaba la media luna creciente...
3 comentarios:
Por poco si me pilla comprando el pan porque nació casi sin darme cuenta; es mentira eso de que "no hay parto sin dolor", que nació con lágrimas pero de alegría, como las que hemos derramado en esta ocasión.
Muchas gracias, madrina, por este bonito texto.
¡Y a organizar una excursión al Machu Chechu y a la Bella Ana!
Un abrazo
Ana Navarro Que bonito!!!!!
Chechu Salas Y ahora vuelvo a tenerla. Te quiero tita!
Publicar un comentario