Y este árbol con nariz respingona me lo dice, aunque no se le caigan las hojas.
Me dice que ya refresca, que este agua que cae sin pasarse de lista, es buena, que ya hay que abrigarse y poco a poco, olvidar el verano, las higueras de la fuente también nos hablan, repletas de fruto, pero este árbol no es de campo, es ciudadano, su trabajo no es dar de comer a las especies animales, su tarea es limpiar los malos humos y dar albergue a los chiquitines voladores que buscan refugio. ¡Lleva tanto tiempo ahí! Sus raices nos sujetan a esta tierra.
Ahora, si. ¡Bienvenido Otoño!.
Me dice que ya refresca, que este agua que cae sin pasarse de lista, es buena, que ya hay que abrigarse y poco a poco, olvidar el verano, las higueras de la fuente también nos hablan, repletas de fruto, pero este árbol no es de campo, es ciudadano, su trabajo no es dar de comer a las especies animales, su tarea es limpiar los malos humos y dar albergue a los chiquitines voladores que buscan refugio. ¡Lleva tanto tiempo ahí! Sus raices nos sujetan a esta tierra.
Ahora, si. ¡Bienvenido Otoño!.