Unas notas breves sobre mujeres y ciencia
Ha habido
muchas mujeres científicas a lo largo de la historia. Desde muy antiguo las
mujeres han participado en el desarrollo de la ciencia, aunque sus nombres no
hayan trascendido tanto como el de los hombres. A continuación aparece una
lista de mujeres de las cuales hay documentación sobre las actividades
científicas en las que hicieron contribuciones notables en su época:
Tapputi‐Belatekallim
(1200 a.C.):
Desarrolló técnicas químicas para la producción de perfumes y cosméticos en la
antigua Babilonia.
Teano
(600 a.C.):
Matemática y médico griega, asumió el liderazgo de la escuela pitagórica cuando
murió su esposo (Pitágoras).
María
la Judía (s. I): Creó
utillaje y procedimientos empleados en química (como el baño María).
Hipatia
de Alejandría (370‐415): Matemática y astrónoma griega, fue
la componente más famosa de la
Universidad de Alejandría cuando ésta era el centro
intelectual del mundo occidental.
Marie
Meurdrac (s. XVII): Publicó en 1666 La chymie charitable et facile
en faveur des dames, el primer libro de química escrito por una mujer.
Marie
Anne Pierrette Paulze (1758‐1836): Prosiguió los trabajos de Lavoisier
(que era su esposo) y se encargó de la publicación de los libros de éste tras
su ejecución.
Jane
Marcet (1769‐1858): En 1806 publicó Conversations on Chemistry,
redactado pensando en las mujeres y que fue ampliamente usado como libro de
texto durante 30 años en los Estados Unidos de América y en Gran Bretaña.
Emmy
(Amalie) Noether (1882‐1935): Hizo notables contribuciones
matemáticas (teoría de grupos, álgebra abstracta...). Estableció la conexión
entre las simetrías y las leyes de conservación en física. Sin embargo, los
nombres que más suelen trascender son los de aquellas personas que reciben el
Premio Nobel. Desde que se instauró este premio sólo lo han recibido quince
mujeres –en dieciséis ocasiones en las especialidades científicas (Física,
Química y Fisiología o Medicina).
Estas
mujeres Premio Nóbel son:
Maria
Sklodowska‐Curie (1867‐1934): Premio Nóbel
en Física en 1903, compartido con su
esposo,
Pierre Curie, y con Antoine Henri Becquerel, por el descubrimiento de la
radioactividad natural. Premio Nóbel en Química en 1911 por la separación del
radio. Fue la primera mujer que recibió el Premio Nóbel en Física y es la única
persona que ha recibido dos Premios Nóbel en dos áreas científicas diferentes.
Irène
Joliot‐Curie (1897‐1956): Premio
Nobel en Química en 1935, compartido con su esposo, Frédéric Joliot, en
reconocimiento a sus trabajos para sintetizar nuevos elementos radioactivos. Era
hija de Maria Sklodowska Curie y de Pierre Curie.
Gerty
Theresa Cori (1896‐1957): Premio Nóbel en Fisiología o
Medicina en 1947 por sus trabajos sobre enzimas, compartió este Premio con Carl
Ferdinand Cori, que era su marido, y con Alberto Bernardo Houssay. Fue la
primera mujer que recibió el Premio Nóbel en Fisiología o Medicina.
Maria
Goeppert‐Mayer (1906‐1972): Premio Nóbel
en Física en 1963, compartido con Eugene P. Wigner y J. Hans D. Jensen, por sus
descubrimientos relacionados con la estructura nuclear en capas.
Dorothy
Crowfoot Hodgkin (1910‐1994): Premio Nóbel en Química en 1964 por
la explicación dela estructura de la vitamina B12. Fue la
primera persona en usar los ordenadores para resolver problemas bioquímicos.
Rosalyn
Sussman Yalow (1921‐2011): Premio Nóbel en Fisiología o
Medicina en 1977 por ”Ensayos sobre radioinmunodeficiencia, que compartió con
Andrew Schally y Roger Guillemin.
Barbara
McClintock (1902‐1992): Premio Nóbel en Fisiología o Medicina
en 1983 por su descubrimiento de elementos genéticos móviles, de enorme
importancia para entender la organización y función de los genes.
Rita
Levi‐Montalcini (1909‐2012): Premio Nóbel
en Fisiología o Medicina en 1986 por el descubrimiento del factor de
crecimiento de los nervios. Compartió el Premio con Stanley Cohen.
Gertrude
Elion (1918‐1999): Premio Nóbel en Fisiología o Medicina en 1988 por el
descubrimiento
de importantes principios de tratamientos médicos, que tuvieron como consecuencia
el desarrollo de nuevos medicamentos. Fue galardonada junto con George Herbert
Hitchings y James Black.
Christiane
Nüsslein‐Volhard (1942): Premio
Nobel en Fisiología o Medicina en 1995 por sus trabajos relativos al control
genético del desarrollo embrionario temprano. Compartió el premio con Edward B.
Lewis y Eric F. Wieschaus.
Linda
B. Buck (1947): Premio Nóbel en Fisiología o Medicina en 2004 por sus
descubrimientos sobre los receptores aromáticos y la organización del sistema
olfativo. Recibió el Premio junto con Richard Axel.
Françoise
Barré‐Sinoussi (1947): Premio Nóbel
en Fisiología o Medicina en 2008 por su descubrimiento del virus de la
inmunodeficiencia humana. Compartió el premio con Harald zur Hausen y Luc
Montagnier.
Elizabeth
Blackburn (1948) y Carol Greider (1961): Premio Nóbel
en Fisiología o Medicina en 2009 por descubrir cómo los cromosomas están
protegidos mediante telómeros y la enzima telomerasa. Compartieron el premio
con Jack Szostak.
Ada
E. Yonath (1939): Premio Nóbel en Química en 2009 por
sus estudios sobre la estructura y función de la ribosoma. Compartió el premio
con Venkatraman Ramakrishnan y Thomas A. Steitz.
Además,
también hubo varias mujeres que participaron activamente en descubrimientos que
después fueron galardonados con el Premio Nóbel, pero ellas, por diversos
motivos, no lo recibieron. Entre éstas destacan:
Lise
Meitner (1878‐1968): Explicó, junto con Otto Hahn, el mecanismo de la fisión
nuclear de los núcleos pesados, aunque únicamente Hahn recibió el Premio Nóbel
en Química en 1944.
Chien
Shiung Wu (1912‐1997): Hizo los experimentos que pusieron
de manifiesto la no conservación de la paridad en las interacciones nucleares
débiles, lo cual fue explicado
teóricamente
por Chen Ning Yang y Tsung Dao Lee, quienes recibieron el Premio Nóbel en
Física en 1957.
Rosalind
Franklin (1920‐1958): Participó activamente en las investigaciones sobre la
estructura del ADN. Murió antes de que el Premio Nóbel en Fisiología o Medicina
fuera concedido en 1962
a Francis
Crick, James Watson y Maurice Wilkins por la explicación de la constitución del
ADN.
Jocelyn
Bell Burnell (1943): Mientras era estudiante de
doctorado con Anthony Hewish descubrió los púlsares, lo cual sirvió para que su
profesor profundizara en su estudio. Anthony Hewish y Martin Ryle compartieron
el Premio Nóbel en Física en 1974.
Rafael
García Molina (rgm@um.es)(Resumen)